
Una pequeña barca, no muy consistente, ha llegado a mar adentro manteniéndose a flote. Ha sobrevivido dandos tumbos en el mar, aguantando las fuertes oleadas de viento que arrasan de norte a sur. Logra llegar a islotes cada cierto tiempo, donde sus navegantes reposan y consiguen algo de fruta para seguir adelante, pero sólo durante otro viaje marino, hasta la siguiente isla. Su destino es llegar a puerto, pero tiene que recorrer medio mundo para ello. Sólo necesitan vitaminas, y saber mantener el equilibrio de las velas... a día de hoy, viento en popa. Pero a veces, parece que corta hacia proa...
No hay comentarios:
Publicar un comentario